Por: Susana Prado
Tras una primera película de “A 47 metros”, en donde el terror, desesperación e incertidumbre se apodera de los espectadores; los tiburones blancos más peligrosos del mundo regresan a la pantalla a atormentar a todo aquel que se siente en las butacas.
Dos medias hermanas que tienen problemas de acoplamiento y comunicación están por vivir uno de los capítulos más difíciles de sus vidas. Su padre un investigador de ruinas mayas, encuentra en Yucatán México un túnel que lleva a lugares nunca antes imaginados. En el afán de que sus dos hijas se lleven mejor, él y su esposa deciden regalarle a Mia y Sasha un paseo en bote para conocer a los famosos tiburones blancos, pero los planes girarán drásticamente cuando las amigas de Sasha las inviten a explorar una zona desconocida sin imaginarse lo que les va a pasar.
Las mujeres deciden bucear para conocer una antigua ciudad bajo el agua ignorando por completo que están entrando al territorio de especie de tiburones blancos más mortales del planeta.
En una travesía para lograr salir de ahí antes de que el oxígeno que llevan se consuma, que las fuertes corrientes las arrastren a lo más profundo del océano o que sean devoradas por uno de los tiburones; el público se mantendrá al borde de su asiento sufriendo junto con las protagonistas la desesperación y horror de lo que están viviendo.
Terror a 47 metros: El segundo ataque, llegará a los cines mexicanos el próximo 18 de octubre.
